DIÁLOGO CON MIGO
Alexander Zanches
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Hola
tú
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Hola
Yo
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¿Qué
me cuentas de nuevo?
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Mmmm… tú con tus chismes. De Nuevo, no te cuento
nada. Nuevo, todo.
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¿Cómo
qué?
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A
Qué no lo pongas a bailar, que la cumbia es para los que saben del asunto. Yo suelo
pisar los pies a las que no me enseñan sus trucos al gozar la danza.
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Tú
eres un pez entre las manos.
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El
pez y el agua, en el agua y en el pez, Tú. No pretendas desnaturalizar la
esencia, no sea que la vida te pise los pies.
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¡Ok!,
empecemos de nuevo.
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La
vida no se detiene, Yo. Corriente que se estanca, agua que se pudre.
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Así
me gusta oírte hablar. ¿Dónde aprendiste?
-
¿Tan
pronto olvidas? Hasta pareces no humano: preguntas lo que sabes, por eso
tropiezas.
-
No
me regañes, Gatodeagua. Sé que
anduviste por México.
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Yo
estoy siempre bajo el mismo sol y a la luz de las mismas estrellas de siempre. Lo
que pasa, Tú, es que ya olvidaste conversar con la luna y sus adeptos.
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O
sea, ¿a eso fuiste tan lejos?
-
Sí
y no. Fui para esconderme un tiempo de tus preguntas. Igual sé que la elipse es
eterna y que todo viaje termina donde inicia. Por eso volví, como Penélope a la
rueca.
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Áyalaaaa…
ta buena esa. Mejor no sigo preguntando.
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Haces
bien, Yo. Tú ¿qué has hecho? ¿Nada? Ni tú mismo crees lo que piensas.
-
Es
cierto.
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