miércoles, 31 de octubre de 2012


¿CUÁL ES ESTE LLANTO SECO
que por dentro se desborda?

ese es el del ángel
junto al río contenido y detenido por el hombre
que se afana en amasar la tierra buscando
las partículas subatómicas de la nada en el bolsillo
de la nada en las arenas
removiendo piedra y piedra
reteniendo el agua
canalizándola encerrada
hurtándola del surco en la llanura
verde lejanía ya seca ya polvorosa calentísima

ese llanto afiebrado es el del ángel desterrado
expulsado a las estrellas
castigado
que da alas a la noche con su llanto
paralélico y antiquísimo
junto a los ríos de Babilonia
ríos de dolor impronunciablemente mudo
de las liras colgadas de las ramas del sicomoro

es el llanto del río de fuego que fluye por las venas
volcán activo y vigilante que nos guarda
y nos observa los pasos vacilantes con que avanza
humana en fin la Humanidad bailando en círculos
que es como dilucida el hombre sus problemas
cuando decide romper las ligaduras
que lo atan y detienen

jueves, 25 de octubre de 2012

EL PRÍNCIPE CONSORTE

En su febril madurez desnuda y veinteañera, la mujer entra. Ante la sola visión del satén azul sobre la cama enorme, donde las almohadas semejan nubes inexactas, olvida cerrar la puerta y acepta la invitación a lanzarse al vacío, abiertos los brazos, como si nadara -pez inexacto- recordando a su marido, que ha marchado ayer a Tierra Santa, a la Cruzada. Recordando, nada o vuela dando vueltas, revolcándose suavemente, electrocutándose al contacto de la tela cuando 

-¡Mein Got! 
-¡Meine junge Dame!, "disculpe"...

retrocede asustado el mozo. La mujer le ruega, le suplica...  no mucho.



SPARTACUS


A  Espartaco se le unieron dos señores
                        el los obreros y el de los esclavos
en ese orden fueron éstos
los que intercedieron llegada la hora
de aplacar la ira del corazón
en el corazón de los que extraviaron la libertad
en mano extraña bajo yugo extranjero

fueron éstos los que conferenciaron
ante la corona recuperada durante las fiestas
que se verificaron durante más de un año
a las puertas de la ciudad y las murallas
fueron respetadas
fiesta permanente de la palabra
que elevó a la categoría de siervo al esclavo
algunos siglos después
a cambio de que no se destruyeran los palacios
ni los templos las fuentes ni las calles empedradas
ni que cayeran los obeliscos
ni que piedra sobre piedra se manifestara
la antecedencia de la destrucción del templo
donde el Maestro daría algunas de sus mayores enseñanzas

en estas fiestas brilló intensamente el Príncipe-Lucero
de Esparta

¿o fue Aníbal?

…no sé tú
pero esto de la historia de los vencedores
es cosa seria…

miércoles, 24 de octubre de 2012


HOY AMANECÍ CON GANAS DE LLAMARME
como llaman las flamas en la noche

al extraviado que en el bosque acude al llamado

de la luz sonámbula del candil del ermitaño


amanecí deseando imperativamente

trocar los cimientos de este enorme ego

que me defiende hasta de mí mismo


amanecí con unas ganas futurísticamente traviesas
de llamarme Gonzalo y al antiguo nombre
domesticarlo envidándolo de vacaciones
-tras casi cuarentaycinco años de valioso servicio
en pro de cuanto fuera necesario
-
a la retaguardia bajo la protección de la estrella
sublime y nueva

hoy me inauguro

Gonzalo Sánchez-Alejándrez.

miércoles, 17 de octubre de 2012

EL FRAGOR DE LAS ENAGUAS


Por la ventana semi-abierta, un airecillo juguetón entra y la despierta justo antes de que el clarín llame a formación urgente. Bostezando, estira los brazos, con los puños cerrados. Se eriza cuando los cabellos, en cascada, le rozan los pezones de sus senos túrgidos. Definitivamente, se siente somnolienta, todavía. Cubre pudorosamente su desnudez recién casada y se decide. Abre la puerta y se lanza sobre la lanza que duerme en la habitación contigua –como ordena la tradición que observan, bajo la celosa vigilancia de la casa materna, de dormir en camas separadas hasta pasado un año de feliz convivencia-.

El soldado está de licencia durante un año. Es joven y condesciende ante la urgencia del clarín que entra por la ventana semi-abierta, anunciando el inicio de la danza del colibrí ante la flor de los tiempos que, a su tiempo, habrá de convertirlo en fruta.

miércoles, 10 de octubre de 2012


NADA QUÉ CELEBRAR

La sangre del indio, ay! Se derrama…”


Martina Portocarrero
trovadora peruana


Sangre del indio
sangre del pueblo
se derramó
debajo del puente
de la memoria
roja corrió

sangre valiente
sangre del hijo
sangre del padre
¿por qué? ¿por dios?

Ay! Dime abuela
Ay! Dime madre
Ay! Dime Patria
¿por qué razón?

Porque no vieran
los luego nietos
y lo supieran 
se construyó
un puente sordo
que nos aleja
del llanto mudo
del río abuelo
que los lloró

Ay! Dime río
Ay! Dime cerro
Ay! Dime nube
¿qué nos pasó?
mi sangre hispana
mi sangre negra
mi sangre india
te lo pregunta
y pregunto yo

indio dame tu mano
dale tus penas
a mi tambor
que lloren juntos
tu canto amargo
tu lucha fiera
contra el Señor
que nos ataca
desde sus templos
en nuestras tierras
¿con qué razón?

ya no lloremos
vayamos juntos
en esta brega
por los caminos
en pos del día
en que entonemos
un himno hermoso:
¡LIBERACIÓN!
del yugo impune
en nombre de Dios

Ay! Dime abuela
Ay! Dime madre
Ay! Dime patria
¿por qué razón?

Alexander Zanches
www.poetaandariego.blogspot.com

lunes, 8 de octubre de 2012


EN EL MUNDO QUE ANHELO
las batallas se librarán
a leves mordiditas en la nuca
a punta de palabras
                                    dichas al oído

las espadas ya no serán
lenguas de doble filo
ni correrá la sangre
-si es que llegara a correr-
más allá de la primera vez

en el mundo que anhelo
será nuestra cama un cielo.


SÍNCOPE


El hombre, tras quince años de ausencia, tras un lapso tan breve como lo que tarda en parpadear una libélula, decide regresar. El tiempo se fractura en ese instante. No hay futuro no hay pasado, sólo presente y silencio. Espacio fríamente blanco. Definitivamente lívido, desciende sin percatarse por dónde, la ladera desde cuya cumbre observaba la hondonada. Despierta cuando cruza el río no muy hondo y mira detrás de sí la montaña que se yergue entre la niebla como un ensueño. Sonríe. 


Del otro lado, las urgencias tardías, las sirenas inútiles, la frialdad ya casi tibia de los quirófanos que se diluyen en la sombra de un mal sueño.